miércoles, 30 de noviembre de 2011
sábado, 19 de noviembre de 2011
Casualidades
Escribo lo que escribí anoche y, a la mañana siguiente, me llamas por accidente por primera vez en nuestra vida.
¿Por qué el destino no nos deja en paz?
¿Por qué el destino no nos deja en paz?
viernes, 18 de noviembre de 2011
Desde la cama
Nunca me había fijado en que tu nombre sólo aparece una vez en el blog: el día que me mandaste aquel correo y volvimos a hablar después de seis años.
Hoy, casi cuatro años después, soy yo quien no deja de escribirte mil líneas dentro de mi cabeza, quien no deja de inventar cosas con las que mantener mi mente ocupada durante el día aún sabiendo que cada noche vuelves a mis pensamientos y doy mil vueltas en la cama imaginando que en ese momento estás abrazando a otra persona...
Llevo desde las doce en la cama, sin dejar de pensar en ti.
Te echo de menos tanto como el primer día.
Te necesito tanto como antes de reencontrarte.
Te sigo queriendo como siempre lo he hecho.
Hoy, casi cuatro años después, soy yo quien no deja de escribirte mil líneas dentro de mi cabeza, quien no deja de inventar cosas con las que mantener mi mente ocupada durante el día aún sabiendo que cada noche vuelves a mis pensamientos y doy mil vueltas en la cama imaginando que en ese momento estás abrazando a otra persona...
Llevo desde las doce en la cama, sin dejar de pensar en ti.
Te echo de menos tanto como el primer día.
Te necesito tanto como antes de reencontrarte.
Te sigo queriendo como siempre lo he hecho.
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